A man prepares to vote in Caserío Tui Bul. Graham Hunt
Un hombre se prepara para emitir su voto en el Caserío Tui Bul.

On March 16, 2011, 17,849 residents of the predominantly Maya Mam municipality of San Martín “Chile Verde” Sacatepéquez, Quetzaltenango, added their voices to those of the roughly 600,000 people across Guatemala who have rejected the imposition of mining and hydroelectric megaprojects in their communities in more than 50 good faith community referenda.  As reported in La Prensa Libre, an undisclosed company planning to build a hydroelectric plant in the area approached the municipal government for authorization; in response, the municipal mayor, Martín Vásquez, decided to place the decision in the hands of the population.  63 people voted in favor of allowing mining and hydroelectric companies to operate in the municipality.

El 16 de marzo, 2011, 17 849 residentes del municipio mayoritariamente maya mam de San Martín “Chile Verde” Sacatepéquez, Quetzaltenango,sumaron sus voces a las de unas 600 000 personas de Guatemala quienes han rechazado la imposición proyectos hidroeléctricos y mineros en sus communiidades a través de más de 50 consultas comunitarias de buena fe.  Como se reportó en La Prensa Libre, una compañía, cuyo nombre no fue publicado, con planes de construir una planta hidroeléctrica en el área, hizo un acercamiento al gobierno municpal para pedir autorización; en respuesta, el alcalde municpal, Martín Vásquez, decidió dejar la decisión en las manos de la población.  63 personas votaron a favor de dejar a compañías mineras e hidroeléctricas operar en el municipio. 
A member of the auxiliary mayor’s office looks on as residents vote in Caserío Tui Bul. Graham Hunt
Un miembro de la alcaldía auxiliar observa mientras residentes emiten su voto en el Caserío Tui Bul.

Graham Hunt

Manuel Vaíl Mateo, representative of the municipality of Huitán, Quetzaltenango, and member of the Regional Council of Ancestral Authorities of the West, speaks with the public in the community of Loblatzán about the central government’s effort to regulate community consultations. Graham Hunt
Manuel Vail Mateo, representante del municipio de Huitán, Quetzaltenango, y miembro del Consejo Regional de Autoridades Ancestrales de Occidente, se dirige al publico en la comunidad de Loblatzán, dando a conocer la intencion del gobierno central de reglamentar las consultas comunitarias.

The referendum was carried out in the midst of growing national tensions regarding an initiative by the central government to regulate community referenda in Guatemala.  During the unveiling of the initiative on February 23, 2010, the government announced that civil society organizations would have 30 working days to submit revisions to the proposed legislation.  As reported in a previous post on this blog, organizations and communities from around the country have rejected the government’s present attempt to regulate community consultations, denouncing that the proposed legislation was redacted at the behest of business interests and without the participation of the communities to be affected.

La consulta se llevó a cabo entremedio de tensiones nacionales crecientes en torno a una iniciativa del gobierno central para regular las consultas comunitarias en Guatemala.  Durante el desvelo de la iniciativa el 23 de febrero, 2010, el gobierno anunció que las organizaciones de la sociedad civil tendrían 30 días hábiles para entregar sus revisiones a la legislación propuesta.  Como se reportó en una entrada previa a este blog, organizaciones y comunidades de muchas zonas del país han rechazado el intento del gobierno de normar las consultas, denunciando que la legislación propuesta fue redactada a instancias de la empresa privada y sin la participación de las comunidades que serían afectadas.

A community leader from Cabricán, Quetzaltenango, spoke to the public in Lablatzán. Graham Hunt
Una lideresa comunitara de Cabricán, Quetzaltenango, impartió un mensaje al público en Lablatzán.
Observers and volunteers eat lunch in San Martín’s market. Graham Hunt
Observadores y voluntarios almuerzan en el mercado de San Martín.

The banner, placed by local teachers, reads “This March 16 say no to the sale of our  Mother Earth.” Graham Hunt
La pancarta, colocada por el magisterio local, dice “Este 16 de marzo digamos
no a la venta de nuestra Madre Tierra.”
A resident votes in the center of San Martín. Graham Hunt
Un residente vota en el centro de San Martín.

A woman marks her ballot in the center of San Martín while volunteers stand by to guarantee her right to a secret vote. Graham Hunt
Una mujer marca su papeleta en el centro de San Martín mientras voluntarios velan por su derecho al voto secreto..

Community mayors oversaw the voting in central San Martín. Graham Hunt
Alcaldes comunitarios custodiaban las votaciones en el centro de San Martín.

A young voter receives her ballot in central San Martín. Graham Hunt
Una votante joven recibe su papeleta en el centro de San Martín.

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Residents and visitors were invited to leave messages for the people of San Martín. Graham Hunt
A residentes y visitantes se les invitó que dejaran un mensaje al pueblo de San Martín.

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A delegation from the Council of Elders of San Juan Ostuncalco visited San Martín. Graham Hunt
Una delegación del Consejo de Ancianos de San Juan Ostuncalco visitó a San Martín.

A member of the Council of Elders of San Juan Ostuncalco speaks to the public. Graham Hunt
Una representante del Consejo de Ancianos de San Juan Ostuncalco se dirige al público.

A soccer game in the central plaza of San Martín. Graham Hunt
Un partido de futból en la plaza central de San Martín.

A banner hung above the road leading out of San Martín reads “We need to live!” and features a ballot marked “No” to prospective megaprojects in the municipality. Graham Hunt
Una pancarta colgada sobre la salida de San Martín dice “¡Necesitamos Vivir!” y despliega una papeleta marcada “No” en contra de prospectivos megaproyectos en el municipio.

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