Lunes 20 de mayo

Se presentó el  primer perito en antropología forense Raúl Humberto Archila García, quien trabajó en la FAFG (Fundación de Antropología Forense de Guatemala) hasta 2013 y se presentó a ratificar 3 peritajes de diversas fosas tanto individuales como colectivas.

El segundo perito del día, el historiador Ángel Romeo Valdez Estrada para ratificar su peritaje sobre la cultura del pueblo Ixil, el cual fue elaborado a solicitud de diversas instituciones. El perito habló sobre el racismo estructural en Guatemala y las acciones contra el pueblo Ixil:

“La alteración de una cultura con el objetivo de precipitar el aniquilamiento de los habitantes que la viven y practican, conlleva un proceso que previamente fue llevando a cabo, no es espontáneo, fortuito y tampoco casual, obedece a un plan estratégico debidamente diseñado para su ejecución”

También describió los impactos del desplazamiento forzado y el uso de la categoría de “enemigo interno”:

“Un grupo nacional no debe ser considerado enemigo interno en su conjunto y tampoco vulnerarse su derecho a la cultura alterándola, aniquilando y cuestionando. En el caso del pueblo Ixil ese proceso inició previamente por medio de estudios “in situ” que determinaron la forma de vida, la cultura y las relaciones que podrían producir la alteración respectiva, así como los posibles efectos que causarían el desarraigo y la aniquilación de parte de su población” 

El perito también señaló que “El anticomunismo fue el discurso para que la gente aceptara el genocidio.”

El tercer perito del día, José Fernando Alonso, laboró en la Fundación de Antropología Forense de Guatemala (FAFG), se presentó a ratificar diversos peritajes de antropología física en Chajul, en el cual identificó diversas osamentas. 

Cortesía de Verdad y Justicia Guatemala

Martes 21 de mayo 

En la audiencia de hoy, el Tribunal de Mayor Riesgo “A” escuchó las declaraciones de 2 peritos.

El primero en declarar fue Luis Raúl Salvadó Cardoza, quien ratificó el peritaje “Conflicto Armado Interno y Pueblo Ixil, 1978-1982 -elementos para su estudio-”. Su peritaje, pedido por el Ministerio Público, se centró en la política de tierra arrasada en la región Ixil, durante el gobierno de Fernando Romeo Lucas García y  la represión estatal: “la tragedia del Pueblo Ixil no solo se debe a unas cuantas personas, sino a un Estado que se capacitó en destruir a ese pueblo desde las doctrinas de seguridad y lucha contrainsurgente durante el Conflicto Armado Interno”. Se refirió a aspectos como el abandono del Estado respecto a la región Ixil, la organización del Pueblo Ixil para acceder a tierras, y los impactos de la represión anticomunista, que luego pasó a ser contrainsurgente y que tuvo efectos prácticos en la persecución de campesinos identificados como “enemigo interno”. 

Se refirió a la Guerra Fría y la Doctrina de Seguridad Nacional como marco de referencia para el conflicto armado en Guatemala.  El perito también indicó que, desde el periodo de la Colonia, el Pueblo Ixil sufrió el despojo de sus tierras; y lo mismo ocurrió durante el Conflicto Armado.

El segundo perito: Edgar Alberto Telón del Cid, ratificó diversos peritajes de arqueología forense mientras trabajó en la búsqueda de personas específicas a solicitud de familiares de las víctimas. 

Cortesía de: Verdad y Justicia Guatemala

Miércoles 22  y Jueves 23 de mayo

El perito Marco David García King, licenciado en bioquímica y microbiología,experto en genética, se presentó durante dos días para ratificar sus peritajes sobre su labor en identificación por medio de prueba comparativa de ADN con familiares.

El perito, quien labora para la FAFG como encargado de la Dirección de Genética Forense y del Banco Genético, indicó que para lograr la identificación de las víctimas, se busca un resultado del 99.99% de coincidencia con el ADN de familiares.

Por ejemplo, declaró que en el Destacamento Militar de Xolotzinay, se recuperaron 80 osamentas,  se identificaron 60 por medio de análisis de ADN y todas han tenido un 99.99% de coincidencia genética entre los familiares y las osamentas de las víctimas, lo cual probaría científicamente la veracidad de los testimonios de los familiares ante el Tribunal y el hecho de haberlas extraído de fosas comunes, en el antiguo Destacamento Militar, comprueba la responsabilidad del ejército de Guatemala y del general Manuel Benedicto Lucas García en su calidad de Jefe Operativo del Ejército de Guatemala a principios de 1982.

Cortesía de: Verdad y Justicia Guatemala