Ana (elle), Internacionalista 2023, escribió esta carta el 23 de octubre de 2023 durante el Paro Nacional de Guatemala.

En este momento, es el día 21 de un masivo Paro Plurinacional en Guatemala, liderado por las Autoridades Indígenas. Han sido días con más de 100 puntos de cierre de carreteras en todo el país.

Crédito de la fotografía: Internacionalista NISGUA. Cientos de personas protestan frente al Ministerio Público (MP). Octubre de 2023. Ciudad de Guatemala.

El pueblo de Guatemala exige: democracia, la renuncia de la Fiscal General Consuelo Porras y la renuncia de otros políticos corruptos que han llevado a cabo acciones antidemocráticas en el contexto de las elecciones presidenciales de agosto. La huelga ha sido un momento en el que el pueblo guatemalteco está recuperando el espacio público: bailando en las calles, jugando al fútbol, montando en bicicleta, cocinando y compartiendo alimentos, celebrando ceremonias.

El tamaño, la organización y el liderazgo Indígena interterritorial de las movilizaciones es histórico. Energía, solidaridad y ojos puestos en Guatemala. (Echa un vistazo a este vídeo de 2 minutos sobre el paro)

En una próxima carta, compartiré más sobre lo que han sido estos días, pero aquí es donde quiero empezar: mis primeras dos semanas en Guatemala.

Crédito de la fotografía: NISGUA Internacionalista. Imagen de una carretera de tierra roja cerca de Copal AA. Está rodeada de árboles y un dramático cielo nublado.

En el pueblo de Copal AA, hay un altavoz en una colina que puede oírse desde cualquier punto de la comunidad de doscientas personas. Al bajar del autobús, se dicen tres nombres por el altavoz, seguidos de “¡recuerden tener la cena lista a las 6pm!”.

Cada vez que alguien se aloja en Copal AA, la comunidad asume la responsabilidad colectiva de alimentar a les invitades. Esa primera noche, doña Ana me recibió para cenar (¡yay Anas!). Para entender por qué nos invitaron a Copal AA, hay que conocer su historia.

Copal AA fue creada por refugiades retornados en la década de 1990. Estos retornades se vieron obligados a abandonar sus tierras por las políticas genocidas de “tierra arrasada” promulgadas por el ejército guatemalteco entrenado por Estados Unidos en la década de 1980. ¿Dónde buscaron refugio? Les refugiades Indígenas guatemaltecos buscaron refugio en México durante aproximadamente una década, tras la cual negociaron un acuerdo con el gobierno guatemalteco para su regreso. En este acuerdo, los retornados mantuvieron su derecho a una presencia internacional antes, durante y después de su regreso. Ahí empiezan las relaciones de acompañamiento internacional.

Copal AA (su nombre completo Copal AA La Esperanza) es una comunidad creada por un pequeño grupo de retornades que bautizaron su pueblo con el nombre del agua y la esperanza, mezclando el español y las lenguas mayas (hay al menos cinco lenguas mayas habladas por los habitantes de Copal AA, que utilizan el español para comunicarse como segunda lengua común). Y la comunidad se toma en serio el nombre que le dieron sus ancianes fundadores. Está muy unida y, al encontrarse en el cruce de dos grandes ríos, pueden cultivar los alimentos necesarios para alimentar a la comunidad, beber y bañarse. El agua es vida. Pero también significa que están amenazados por un proyecto hidroeléctrico extractivo que amenaza toda la vida de la zona.

Crédito de la fotografía: NISGUA Internacionalista. Mural en la pared de un edificio escolar que muestra a personas protestando junto a un río. Sostienen carteles que dicen “El agua es para la vida, no para la muerte”, “Copal AA presente” y “Pueblo unido jamás será vencido”.

La comunidad está organizada, junto con otras más de 30 comunidades de la zona, para defender el agua y la vida. Estas comunidades rechazan categóricamente el proyecto de presa de Xalalá (enlace disponible sólo en inglés). Han hecho un llamado a la concientización y solidaridad internacionales con su lucha.

Después de esa primera cena con doña Ana, pasamos varios días reuniéndonos con gente de la zona, incluido el Consejo Comunitario o gobierno de la comunidad, profesores y estudiantes, y organizadores comunitarios de varios pueblos de la región. Empezar a conocer y entablar relaciones con la gente de Copal AA fue una forma increíble de comenzar mi estancia aquí. No se puede hacer nada sin confianza, sin conocerse de verdad y confiar en les demás.

Crédito de la fotografía: NISGUA Internacionalista. Mural en la pared de un edificio escolar en Copal AA. Hay una imagen de personas rompiendo cadenas, resistiendo a un zapato que les pisa y enfrentándose a militares armados con el puño en alto, lápices y libros. Debajo está escrito “La educación como práctica de la libertad”.

¿Entonces, por qué estoy aquí y por qué estaba buscando a NISGUA?

Crédito de la fotografía: NISGUA Internacionalista. Pegado en un puente de Ciudad de Guatemala, “Que viva el poder popular organizado” 

Durante mucho tiempo quise vivir en algún lugar de Latinoamérica. Mi primer idioma fue el español, nací en la llamada California. Soy blanque y judíe. Mis padres nacieron en Colombia y Chile, pero emigraron al Área de la Bahía cuando eran niños. Todas estas verdades se sentían como contradicciones mientras crecía. ¿Quién soy? ¿A dónde pertenezco?

Cuando empecé a implicarme más en mis comunidades de origen (Puichon Ohlone Land) y a ver la importancia del internacionalismo en nuestros movimientos por la vida, la dignidad y la justicia, empecé a tomarme más en serio el deseo de vivir y trabajar en otro lugar.

En algún momento, conocí a alguien que había sido Internacionalista con NISGUA (Red en Solidaridad con el Pueblo de Guatemala), y el nombre se me quedó grabado porque lo que me dijo de elle sonaba como una organización que se tomaba en serio lo que significaba la solidaridad internacional.

Para refrescarles un poco lo que es NISGUA: se formó en los años 80 durante el Conflicto Armado Interno en Guatemala, por gente de EEUU. Una gran parte del trabajo de NISGUA ha sido en el marco del acompañamiento internacional de derechos humanos, acompañando principalmente a organizaciones y personas Indígenas que han solicitado a NISGUA caminar junto a sus luchas para defender la vida, el agua y la tierra; y para buscar justicia por el genocidio cometido durante el Conflicto Armado Interno.

A medida que me familiarizo con las luchas de aquí, me doy cuenta de que todas nuestras vidas están interconectadas, de que los ríos de aquí y los del norte están conectados. Y lo necesario que es que todes escuchemos y nos unamos a les organizadores Indígenas que, en todo el mundo, se han comprometido a mantener vivos y prósperos el agua, la tierra y la gente.

Crédito de la fotografía: NISGUA Internacionalista. Pintada en una pared de Ciudad de Guatemala: “El agua no es negocio. ¡Dejen en paz nuestros ríos!”